En nuestro hogar estamos en plena crianza y educación de tres adolescentes, más una muy loca y caprichosa diabetes tipo 1. Les confieso que los veo no creo que ya tengan la edad que tienen. Con nuestro hijo mayor ya estamos comenzando a planificar sus estudios universitarios y aprendiendo de estos procesos, nos estamos poniendo viejos 
Tener una buena comunicación con tu adolescente es sumamente importante, ya que debemos lograr que nuestros dulces guerreros nos vean como parte de su equipo o recurso, y no como policías o padres helicópteros. Poco a poco nuestros dulces guerreros adolescentes tienen más responsabilidades en su cuidado, por lo que mantener el canal de comunicación y confianza abierto, nos ayudará a evitar conflictos.
La primera regla para fomentar la comunicación con tu hijo es simple:Nunca dejes de intentarlo. Los siguientes consejos nos ayudarán tanto a escuchar como a hablar en formas que mantenga la comunicación abierta con tu hijo. Todos estos consejos los podemos aplicar al manejo de la diabetes tipo 1.
Escucha a tu hijo. “El padre que escucha es el padre al que lo escuchan”. Se recomienda practicar el escuchar activamente, lo que también se conoce como escuchar reflexivamente. Presta mucha atención al lenguaje corporal de tu hijo, el tono y sus expresiones faciales, todo lo que transmita información importante.
No interrumpas. La misma sugerencia que le damos a nuestros hijos aplica también para nosotros. Respeta su derecho a expresar su opinión, aún si no está de acuerdo con ella. Y, si su punto de vista está basado en un mal concepto, escúchalo antes de corregirlo, hazlo con tacto.
Cuida el tono de tu voz. Preguntar es una cosa; interrogar, usando un tono acusador, es otra cosa. Debemos hacer nuestro mejor esfuerzo para no contestarle mal a los adolescentes, como hacemos a veces cuando estamos presionados por el tiempo, cansados o tenemos otras preocupaciones. Evita alzar la voz o gritar sin control.
Haz preguntas que estimulen la conversación. Crea oportunidades para discutir haciendo preguntas que animen a los jóvenes a describir, explicar, compartir opiniones; mientras más específicas sean estas preguntas y más se basen en lo que ya sabes que está en la mente de tu hijo, más eficaces serán.
Aprovecha las oportunidades para conversar cada vez que puedas.Algunas veces dejamos de hablar (posponemos) con nuestros hijos, esperando el momento perfecto para hacerlo. Con los estilos de vida tan apresurados en la actualidad, esos momentos ideales llegan muy pocas veces.
Recuérdale a tu hijo repetidamente que puede contar contigo para cualquier problema, luego cumple la promesa de aceptación incondicional. Si transmites sorpresa o disgusto, aún no verbalmente, creara barreras entre ustedes. “Puedo no aprobar todo lo que haces, pero sin importar lo que pase, siempre te amaré”.
Manténte alerta para cualquier señal de que tu adolescente quiere hablar. Tu hijo puede estar ansiosamente deseando contarte algo pero se siente cohibido, o asustado, o simplemente no sabe cómo empezar.
Fuente: Healthychildren.org
FUENTE: http://jaime-dulceguerrero.com/7-consejos-buena-comunicacion-adolescente/
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